Se cumplen 18 años desde que el Dok Leipzig da pantalla a los documentales animados. En el programa "Rückblick", como su titulo indica, propone brindarnos las impresiones de diversos directores acerca de acontecimientos que les sucedieron a ellos o hechos politicos que los tocan en lo personal. Tres títulos latinoamericanos con una gran técnica de animación no temen a ilustrar temas tan complejos como el nazismo y las dictaduras militares.

El programa comienza con el cortometraje argentino "Salers" de Fernando Dominguez. Un narrador vuelve a Salers en Francia, para recordar aquella pequeña ciudad bajo ocupación nazi y en especial a una mujer la cual escribía cartas al mismísimo Franco, Mussolini y Hitler. Reconstruye sus recuerdos mientras pinta ante nosotros la dificultad de hacerlo, ya que aquella realidad se remonta en un tiempo lejano y además, es muy diferente de la de hoy en día. Un cortometraje fuerte con colores que dibujan y desdibujan lo sucedido, y en la mayoría de sus casos, que se desbordan despintando los limites de figuras que se puedan identificar como casas. Con su sello pictórico el director nos invita al desafió de intentar reconstruir un recuerdo con vacíos que se generaron en el tiempo que aparentemente son solo posibles rellenar con manchas.

 "Cuentos de viejos – Ysabel. El miedo baja del cielo"  es una co-produccion español-colombiana de los directores Marcelo Dematei y Carlos Smith. Su protagonista Ysabel nos narra, con aquella comicidad con la que nos narran nuestros abuelos, como vivió la guerra civil española en Bilbao, en particular con una anécdota trágico-cómica sobre la irrupción desde el cielo  de un alemán a su ciudad. La propuesta forma parte del proyecto "Cuentos de viejos" (mas información enhttp://cuentosdeviejos.com ) en la cual buscan a través de documentales colaborativos transmediales rescatar la oralidad entre los mas grandes y sus historias del siglo XX. Corto y efectivo, animan una historia de aquella que no quiere olvidarla y hasta logra robar una sonrisa.

"Vicenta" es el cortometraje de Carla Valencia. Pese a que uno sabe de antemano que la directora es ecuatoriana y la historia es sobre una mujer boliviana que emigra a Chile, uno ya puede notar en la dulce voz que la retrata un lazo aparentemente invisible entre estas dos mujeres. En 5 minutos y con sencillez la directora delinea que significaba ser mujer en tiempos de revoluciones y dictaduras militares.